Mi gran confesión bajo el Árbol de Cerezo Pv. Gray

Era una tarde muy normal en Magnolia, cosa que algo parecía destacar, era el Árbol de Cerezo que en esta tarde, sus pétalos de flor caían lentamente a su alrededor, yo caminando por ahí encontré que sería la ocasión perfecta y el lugar perfecto para decidir la felicidad de mi corazón, muchos días yo estaba pensando en lo que realmente quería, que es lo que pensaba, y todo me llevaba a una sola palabra... Gray.
Nerviosa, caminando por las calles de Magnolia, me dirigí al lugar en donde se encontraba Gray, tenía que hacer algo para impresionarlo, para decirle lo que realmente sentía, entré, y ya como me conocía la mayoría de el Gremio, me saludaron como de costumbre, y yo correspondía los saludos, cuando de pronto a lo lejos encontré que estaba sentado Gray, con una banda le tapé los ojos y le dije tranquilamente:
- Tranquilo, soy yo Rin, te tengo una linda sorpresa, sígueme.
Le tomé la mano y lo llevé caminando por todas las calles de Magnolia, por supuesto, estaba sonrojada, hasta donde estaba el Árbol de Cerezo, la postal era muy linda y yo en mi mente me daba ánimos sola, ya que tenía que ser valiente para decirle lo que yo sentía a Gray, si que llegando, le quité la banda de los ojos a él y le dije:
- ¿Te gusta?
Sonrojada, le tomé la mano y comencé a declararme.
- Cuenta la leyenda... Que cuando dos personas están bajo la lluvia de los pétalos de cerezo una magia celestial se realiza, sobre todo si esas dos personas se aman...
Sonrojada, le tome las dos manos y lo miré fijamente a los ojos.
- Es que Gray... Sé que nos conocemos hace mucho tiempo, y siempre hemos sido amigos... Pero este último tiempo, con todo lo que hemos pasado, todo el apoyo que tu me has brindado... Creo que me he enamorado de ti, y te lo quiero decir ahora, sé que a lo mejor seré muy poco para ti, pero estoy profundamente enamorada de ti, cada vez que pienso en ti la llama de mi corazón se prende mucho más fuerte, y no quiero separarme de ti nunca más, sin tu amor no encontraré la felicidad, mi felicidad es estar a tu lado, quiero permanecer a tu lado y hacerte felíz... Quiero ser tu Julieta para el resto de mis días... Te amo...
Le dije muy sonrojada, y con lagrimas de la emoción en mis ojos.
- ¿Quieres ser mi Romeo? Y vivamos juntos para toda la eternidad...

Estaba allí, aburrido de no hacer nada. Dentro del gremio, había mucha gente, cada cual a lo suyo. Unos bebiendo, otros hablando. Yo estaba sentado en una mesa apartada, sólo, como de costumbre. Pensaba en mis cosas, como había estado haciendo los últimos días. No podia parar de pensar en como mejorarme a mi mismo, y en una chica que me andaba rondando la cabeza.

Siguieron pasando las horas y los minutos y yo seguía concentrado, cuando derrepente sentí que algo me tapaba los ojos oía una voz femenina. Oi lo que me dijo y le respondí:
-Ah hola Rin. Vale, te sigo.
Me cojió de la mano y fuimos caminando por Magnolia, de calle en calle, preguntandome a donde me llevaba y que me quería enseñar. Seguimos caminando un poco más hasta llegar al Árbol de Cerezo. Entonces nos sentamos debajo del árbol y me enseñó una postal.
-Sí, es muy bonita Rin.
Le dije soriendo y contento. La verdad es que era muy bonita. Entonces ella empezó a hablar, y la escuchaba atentamente. Cuando terminó de hablar, me quedé bastante sorprendido con sus palabras, me quedé unos segundos en silencio, procesando aquella información. No pude hacer nada más que decirle la verdad:
-Sí Rin, quiero ser tu Romeo y quiero que seas mi Julieta por siempre. Yo También te quiero, mucho. Me alegro de haberte sido de ayuda cuando la necesitabas. Te quiero.
En ese momento me incliné hacia delante y la besé apasionadamente.
-Te amo

La chica no podía estar mas feliz, lo que siempre había soñado este último tiempo se estaba haciendo realidad, el chico que ella amaba con todo su corazón sentía lo mismo que ella, eso era el regalo mas grande que le había dado la vida, en ese mismo minuto, el árbol comenzó a brillar, y los pétalos de cerezo rodeaban todo el lugar.
- Jamás pensé que esa magia era verdad, que la gente que se juraba y declaraba el amor eterno brillaría el árbol y se haría esta magia...
Respondía el beso apasionado de Gray con una sonrisa y con las mejillas ruborizadas.
- Es tan hermoso esto, que los dos nos amemos... De verdad estoy muy feliz, prometo hacerte el hombre mas feliz de toda la tierra, jamás dejaré que caiga una lagrima de tus ojos, y lo único que haré es que tus ojos estén llenos de felicidad, siempre estaré a tu lado, jamás me iré, siempre me tendrás, siempre estaremos los dos juntos, te amo Gray, con todo mi corazón.
Lo abrazaba muy fuerte con todas sus fuerzas.
- Jamás pensé que esto se haría realidad... El día en que tu me ayudaste, conocí la clase de persona que eres, tienes un corazón muy hermoso, y eres un excelente hombre... Eres lo que le hacia falta a mi vida para ser feliz...

Estaba feliz, de haber encontrado al fin, a una chica que lo amará como Rin. También la amaba ella. Notaron como el árbol empezaba a brillar con fuerza, la leyenda al parecer era cierta. era un verdadero espectáculo de luces. Era muy bonito para la ocasión.Era muy bonito lo que Rin me estaba diciendo, una verdadera declaración. Me alegraba mucho de ello.Y por eso le respondí:
-Si Rin, es muy hermoso, la verdad. Te amo, juro aquí, bajo el árbol de cerezo que siempre estaré a tu lado y te cuidaré, que nada malo te pasará mientras yo esté con vida. Te quiero.
Volvió a darte otro romántico beso en los labios, esta vez con mas ternura. se separó de ella para tomar aire y decirle:
-T-Te amo...
Gray se ponia cada vez mas sonrojado, pero aquello le gustaba. Le gustaba estar con la persona que amaba. Y Mucho.

El lugar cada ves se veía más hermoso, el juego de las luces del árbol realmente eran mágicas y celestiales, mientras miraba sonrojada, pero a su vez muy contenta a los ojos de Gray.
- Jamás pensé que pasaría esto, desde el día en que tu me ayudaste, cuando todos hablaban mal de mi, caí profundamente en amor por ti, eres una gran persona, eres un buen hombre, y estoy contenta de poder compartir este sentimiento contigo.
Le daba muchos besos, mientras lo abrazaba fuertemente, era un sentimiento mas o menos de "no querer perderlo", mi rostro mostraba una felicidad absoluta, mientras que le daba un beso tierno y apasionado.
- ¿Te gustaría ir de viaje conmigo? Si es que no tienes problemas con Fairy Tail... Podría decirse como una mini-luna de miel... A algún resort o algo, o a alguna playa, para que la pasemos los dos juntos, ¿Te parece?

Era un momento único y mágico. Un momento perfecto. Seguían besándose y hablando bajo el árbol, disfrutando aquel momento tan maravilloso.
-Te Amo Rin. Quiero estar contigo.
Se daban muchos besos. Por aquí y por allá, besos. A Gray le encantaba aquello. ella le daba besos y él se los devolvía con ternura y cariño. Ante la propuesta de Rin, Gray dudó un poco, se paró a pensarlo. "¿Qué dirían los del gremio?" pensó. "Bah, me da igual, quiero estar con Rin y eso es lo que haré" Volvió a pensar. Y entonces le respondió a ella:
-Claro Rin. ¡Me encantaría!.Decide tú el lugar.
le dijo, satisfecho de su respuesta, y volvió a besarla.