Una tarde en Sabertooth. [~Libre~]

Había pasado un tiempo desde la última vez que ví a Rin, a pesar de que viajamos juntos por muy pocos días nos habíamos llevado muy bien. El día en que tomamos caminos separados me dijo que me diera una vuelta por el gremio de Sabertooth, pero me había tardado mas de lo esperado debido a unos asuntillos.

- Supongo que me ya me tardé demasiado,pero por lo menos obtuve lo que buscaba, creo que ya iré a visitarla. -

Pensaba mientras terminaba de empacar provisiones para emprender camino a Sabertooth, 3 días mas tarde llegué al pueblo donde se encontraba y luego de deambular un poco preguntando en él, arribé a la entrada del edificio de Sabertooth, era un edificio muy grande y decorado con un estilo totalmente diferente al de la ciudad, confundirlo sería imposible.

Las puertas se encontraban cerradas y estaba muy tranquilo, asi que decidí intentar el metodo más antiguo.

- Hey! Riiiiiiiiiin! Riiiiiin!... Sabertooth!!! Abran o echaré la puerta abajo! Heeeey!!! -

- Esa voz...
Habia escuchado una voz bastante familiar, sabía que era de Kaito, si que me dirijí a la entrada en donde se escuchaba el alboroto, y si, mis pensamientos eran ciertos, era Kaito quién estaba haciendo ese álboroto, si que me dirijí hacia él, lanzé mi serpiente de agua para que lo trajera a la fuerza, y algo nerviosa le dije:
- No hagas tanto álboroto, que el Maestro anda de malos días, le llegó Andrés parece, si que no creo que le gusta algún alboroto, estamos todos realmente asustados, porque sus castigos son horribles, y dime, ¿Qué ha sido de tí estos días?

- Tch, temerle al maestro... valla relación ... - Dije en tono de broma con los brazos cruzados mientras la serpiente de agua me dejaba en el suelo nuevamente.

- ¿Que qué hago aquí? pues te prometí que visitaría...este soy yo, visitando. Aunque no pensé que el edificio de Saber fuera tan grande, se ve que es un gremio fuerte... - Dije mientras miraba parte del interior del edificio, tenía un segundo piso de mucha altura y vigas en el techo estilo europeo, un salón bastante espacioso y en una de las esquinas alcanzaba a ver una especie de sala de estar.

- Hacía tiempo no te veía Rin ¿Cómo va todo? ¿Te han tratado bien por aquí?

- Que tierno eres al venir a visitarme...
Estaba contenta que mi amigo Kaito me hubiese visitado, hace mucho que no tenía una visita de alguien, pero en ese mismo momento, el jefe de el Gremio me gritó.
- ¡¡QUE ESTÁS HACIENDO RIN!! ¿ACASO LAS HADITAS DE FAIRY TAIL TE VINIERON A VISITAR DENUEVO?
- ¡¡¡CALLESE VIEJO DECREPITO!!! A USTED NO LE IMPORTA QUE ME VENGAN A VISITAR, HAGA SU TRABAJO MAESTRO NOMÁS Y DEJEME TRÁNQUILA. - Hacia Kaito - Perdon... jeje, no nos llevamos muy bién, pero de todas formas me quiere igual... No le gusta que hable con Fairy Tail, pero pues, ´tu me conoces jajajajaja.... Y si mi han tratado muy bién, he hecho algunos trabajos, pero nada de el otro mundo, y tu? Aún no tienes Gremio...

- ¿Ese era el maestro de Sabertooth? Que gritón n_nU -

Mirando hacia la dirección del maestro y luego volviendo a Rin cuando ella preguntó sobre que hacía este último tiempo.

- Igual supongo, nada del otro mundo, logré tomar algunos trabajos como independiente asi que al menos no he tenido problemas de dinero. La semana pasada tuve una riña con gente de un gremio oscuro pequeño, y uuhm ah si, estuve en las montañas buscando un tesoro ese trabajo fue duro -

Mientras hablaba con Rin podía ver a lo lejos una que otra persona del gremio, todos se veían fuertes y dedicados, era un gremio muy diciplinado por lo que se podía observar a simple vista.

- Así es, aún sigo sin gremio no he logrado encontrar uno que me agrade del todo, aún no encuentro el gremio al que pertenezco...

La chica muy emocionada, respondió lo siguiente ante los dichos de Kaito.

- ¿Porqué no ingresas a Sabertooth? Eres igual de fuerte que yo, incluso creo que mucho más, hariamos buen equipo junto con Len, o con algunas de mis amigas, lo pasaríamos muy bién, y hariamos todos los trabajos juntos, realmente eh estado un poco sola en estos días, extrañandote compañero de aventuras.

La chica esperaba una respuesta de él, ya que no quería que se fuera y aún estubiese buscando Gremio, y la mejor idea sería que se viniera a Sabertooth.

Escuchando lo que Rin decía mi atención hacia ella aumentaba cada segundo, al oir la propuesta de Rin sobre unirme al gremio donde ella estaba, es decir Sabertooth, muchas ideas pasaron por mi mente. Giré levemente mi cabeza mirando a mi alrededor, arriba, abajo, izquierda, derecha, finalmente al frente.

Podía verse y sentirse un ambiente relajado y estricto a la vez, el tablón de misiones prácticamente lleno de peticiones de trabajos, 1 persona observandolos para escoger uno. Y otro tablón un poco más pequeño en un lugar mas alejado del edificio, apenas podía verse desde donde estabamos.

Pensé un momento los Pro y los Contra de unirme a un gremio. Empuñando mi mano derecha en dirección a donde se había ido el maestro.

- Hmmm, suena interesante, sería mejor que estar durmiendo en lugares desconocidos y vagando por todo el país. Aunque no tengo la costumbre de estar mucho tiempo en un mismo lugar, supongo que no estaría mal, después de todo hay lugares donde solo las personas que perteneces a un gremio oficial pueden entrar -

-Levanté un poco la voz- Rin ¿Sabertooth es fuerte? ¿Sabertooth podrá divertirme? Si me puedes asegurar eso estaré felíz de ingresar a Sabertooth - - Un par de rostros lejanos me miraron con un poco de rabia, y luego se fueron a la parte trasera del edificio -

- Hehe, ¿Que deberé hacer? -

- ¡Claro que sí te divertirás amigo" Sabertooth es uno de los gremios oficialmente más fuertes que existen en Fiore... Los trabajos son bastante duros, y bueno, necesitamos mucha mas gente nueva que sea fuerte, y yo sé que tu lo eres, y encantado te recibiremos en el Gremio... ¡Pero antes tienes que hablar con el maestro! El de seguró te aceptará.

Le dije muy contenta, me emocionaba la idea de estar junto a mi amigo en el mismo Gremio, sobre todo que también estaría mi hermano, y compartiría con Gumi y Miku.

- Ejem... no es un viejete.... es muy joven... Je... Yo le digo así por molestarlo, si que trátalo con réspeto, bueno tu me conoces.

Estaba entrando un poco en pánico por el hecho de las cosas que estaba haciendo Kaito, sabia que me iva a llegar un regaño por su parte, pero eso no me importaba, si que intenté hacer pasar deseparsivido a Kaito, mientras me iva directamente a su oreja.

- El maestro tendrá entre 20 a 30 años... Es muy joven...